El cuerpo humano en su metabolismo consume
oxígeno y produce dióxido de carbono como producto de desecho.
El sistema respiratorio permite intercambiar el
dióxido acumulado en la sangre, por el oxigeno de las vías respiratorias que
entra a los pulmones como parte del aire atmosférico.
El aire entre por la nariz, la faringe, la laringe, la
tráquea y los bronquios.
La inhalación de aire es sólo una parte del proceso de
respiración que lleva a cabo un organismo dependiente del oxígeno. La
respiración incluye todos los mecanismos involucrados en la toma de oxígeno por
parte de las células de tu cuerpo y en la eliminación del dióxido de carbono.
Respirando normalmente, un hombre adulto puede
contener en los pulmones 2.5 litros de aire, en promedio. El volumen de
ventilación pulmonar, que corresponde al aire que entra y sale en cada
respiración, suele ser medio litro. La diferencia se debe a que siempre queda
aire en los pulmones después de la espiración.
Las enfermedades pulmonares de origen ocupacional se
deben a la inhalación de partículas nocivas, niebla, vapores o gases en el
lugar de trabajo. El sitio exacto de las vías aéreas o de los pulmones donde
llega la sustancia inhalada y el tipo de enfermedad pulmonar que desarrolla
dependen del tamaño y de la clase de las partículas. Las más grandes pueden
quedar atrapadas en la nariz o en las vías aéreas grandes, pero las más
pequeñas alcanzan los pulmones. Una vez allí, algunas partículas se disuelven y
pueden pasar al flujo sanguíneo; las defensas del cuerpo eliminan las más
sólidas que no se disuelven.
El polvo de cuarzo y de amianto pueden causar
cicatrices permanentes en el tejido pulmonar (fibrosis pulmonar).
La silicosis, la enfermedad profesional más antigua
que se conoce, se desarrolla en personas que han inhalado polvo de sílice
durante muchos años. El polvo de sílice es el principal elemento que constituye
la arena, por lo que la exposición es frecuente entre los mineros del metal,
los cortadores de piedra arenisca y de granito, los obreros de las fundiciones
y los alfareros.
La
parte visible de la nariz está sostenida por cartílagos. El tabique nasal
divide la cavidad nasal por la mitad y está formado por cartílago en la punta y
por hueso en la parte cercana al cráneo.
La
superficie interior de los dos orificios nasales está recubierta por piel con
gruesos pelos que atrapan partículas de polvo que entran al inspirar aire.
Un
hombre adulto posee una frecuencia respiratoria entre 12–24 respiraciones/minuto, con un promedio de 18 y
cada vez aspira medio litro de aire, lo que equivale a 240 litros por jornada
laboral diaria y 5400 litros por jornada mensual.
Si
el medio que trabaja tiene una carga de polvo fino de 10ug/m3, cuanto polvo
teóricamente depositaria en sus pulmones?
1
gramo equivale 1.000.000 microgramo
1
microgramo equivale a 0,000001 gramos
0,000001
gramo equivale a 1*10^-6 gramos.
•
Un
ambiente de trabajo que tiene 0,2 ugramo por m3 de sílice suspendido podría Ud
calcular teóricamente a cuantos microgramos de silice puede acumular en sus pulmones en
1 día
1 día
•
1 mes
•
1 año
•
5 años
•
10 años
La
cavidad nasal está recubierta por una membrana mucosa que cuenta con muchos
vasos sanguíneos y glándulas que secretan mucosidad. El calor de la sangre
calienta el aire que es inhalado y el polvo queda adherido a la húmeda
mucosidad.
Tres
estructuras curvas denominadas cornetes sobresalen en cada uno de los lados de
la pared de la cavidad nasal y amplían la superficie que calienta el aire
inspirado.
Epitelio
nasal. Esta mucosa de la nariz atrapa
las partículas odoríferas (las que huelen bien) y después las estructuras
amarillas que parecen pelos las transportan al centro olfativo en la parte
superior de la cavidad nasal. Únicamente el 5% del epitelio nasal está
directamente relacionado con el sentido del olfato.
El
epitelio nasal cumple la función principal de calentar el aire para que no
llegue el aire frio a la vía aérea inferior para realizar el intercambio
gaseoso en los alveolos.
Las
vibrisas sirven para captar partículas
de polvo, ambientales, etc para evitar su paso al resto de la vía respiratoria.
Una
pequeña área del techo de la cavidad nasal, inervada por el nervio olfatorio,
es la responsable del sentido del olfato. En la membrana olfatoria hay
receptores especializados en la percepción de las sustancias odoríferas que
penetran la nariz con el aire inspirado y que, al ser estimulados, envían a
través del nervio olfatorio señales.
La glándula
pituitaria roja: Se ubica en la parte inferior de la fosa nasal y está recubierto
por numerosos vasos sanguíneos que calientan el aire.
La glándula
pituitaria amarilla: Se ubica en la parte superior de las fosas nasales y
presenta tres capas (amarilla por la cantidad de células nerviosas:
•
Células de
sostén
•
Células
olfatorias
•
Células
basales
La
faringe está situada por detrás de la cavidad nasal, la cavidad oral y la
laringe, y termina en el esófago.
La
laringe es el conducto situado frente a la faringe y está formado por una
membrana reforzada por músculos. Comienza en el cartílago (epiglotis) que, al
tragar alimentos cierra la entrada de la laringe y evita así que penetren en la
vías respiratorias.
La
epiglotis es un estructura de cartílago localizado en la garganta detrás de la
lengua y al frente de la laringe, y generalmente está derecha en reposo
permitiendo que el aire pase a la laringe y a los pulmones.
Cuando
una persona traga, la epiglotis se dobla hacia atrás para cubrir la entrada de
la laringe, de tal manera que los alimentos sólidos y líquidos no ingresen a la
tráquea y a los pulmones. Después de deglutir, la epiglotis retorna a su
posición derecha original.
La
laringe tiene dos segmentos separados entre si por un pequeño espacio. El
segmento superior comienza en el extremo superior de la epiglotis y termina más
debajo en los pliegues ventriculares. El segmento inferior comienza en las
cuerdas vocales y termina en el lugar donde se une al cartílago cricoides, que
queda algo más abajo, unido a la tráquea
Las
cuerdas vocales están unidas en la parte frontal de la laringe al cartílago
tiroides, y en la parte inferior al cartílago aritenoides.
Cuando
hablamos expulsamos aire , cuando pasa por la laringe hace vibrar las cuerdas
vocales. El cartílago aritenoides gira alrededor de un eje vertical, juntando o
separando las cuerdas vocales.
El
cartílago tiroides protege la parte frontal de la laringe, prominente en los
hombres y denominada nuez de Adán.
